El Racing paga su indolencia inicial, reacciona tarde y cae en Sevilla
El equipo local encarriló el choque con dos goles antes del descanso y Álvaro Antón redujo distancias al final
Cacique Medina envió al palo un penalti a falta de media hora, cuando el cuadro andaluz ya jugaba con diez
El Racing tiró medio partido en Sevilla, reaccionó tarde y desperdició una buena oportunidad ante un rival plagado de bajas y sin grandes motivaciones en la clasificación. Tuvo casi media hora de superioridad, y creó más peligro en el tramo final del encuentro, pero falló hasta un penalti. El tropiezo supone un toque de atención para un equipo lanzado en la segunda vuelta, pero que aún no logró nada.
De inicio, nadie en la grada podía decir que el Racing se jugase media temporada. Salió aletargado, indolente, a merced del rival. Vale que no le saliese casi nada en ataque; pero debió morder en defensa porque un triunfo ante el Sevilla Atlético le podía dar una cierta tranquilidad. Una volea alta de Álvaro Antón tras un precioso sombrero y un tiro de Cami que despejó el portero Javi Varas fueron casi todo su bagaje en el primer tiempo.
Enfrente, el Sevilla Atlético tenía otro ritmo, recursos y ocasiones. Los problemas empezaban para el Racing muy pronto. Replegado, el medio sevillista Jonathan jugaba muy suelto en campo propio y a partir de ahí hilaba el juego. El fililal asustó de todas las maneras: a balón parado, con largos cambios de orientación y con fútbol combinativo. El mejor era Piña, y que el más destacado sea el portero nunca es un buen asunto. Sacó manos salvadoras en llegadas de Ramírez, en un tiro envenenado y en un córner cabeceado por Alfaro... Y menos mal que el Sevilla Atlético desperdició algún que otro balón suelto en los últimos metros.
En el banquillo, el segundo entrenador, José Veiga, pedía más y más intensidad. Pero la situación no cambiaba. El marcador hizo justicia cuando Armenteros remató solo en el segundo palo un nuevo centro desde la banda de Zanev que se paseó por el área sin oposición. El tinglado ya se vino abajo con el segundo gol, después de un penalti del lateral búlgaro sobre Alfaro. Su propio lanzamiento de penalti lo despejó Piña, hasta que llegó Armenteros, más vivo que los defensas verdes, para dejar noqueado al Racing.
Así que Juan Veiga movió banquillo. Sentó a Rubén García para que Cacique Medina acompañase en punta a Carlier y cambió a Zanev por Iván Romero.
El enfermo mejoró algo, sobre todo gracias a un penalti de Ramírez que le costó la expulsión. Pero ni así. Cacique Medina estampó el balón en el poste. Vuelta a empezar.
Pese al mazazo, el Racing mejoró bastante. Llegó con una buena ocasión de Pereira y una buena combinación de Portilla y Medina que terminó con un buen gol de Álvaro Antón. Antes podía haber caído el tercero local, pero la chavalada del Sevilla Atlético ya buscaba el lucimiento personal y desperdició varios contragolpes. El empate no llegó, y el Racing ve como sus rivales se acercan.
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