El delantero español fue el autor de los dos goles del Liverpool frente al equipo Blue, que le permitió al equipo 'Red' mantener la diferencia con el Manchester United a dos puntos, pese al partido de más. Por su lado, Frank Lampard se fue expulsado cuando promediaba la segunda mitad.
Liverpool-Chelsea (2-0).
Fernando Torres necesitaba una gala para poder decir; "Aquí estoy". el delantero español no había llegado a lucirse demasiado desde su regreso a la actividad. Un tanto simple ante el Preston y una gran asistencia a Gerrard habían significado sus únicas grandes intervenciones desde que se recuperó de su lesión.
Así, el punta tomó conciencia de lo que podía generar en propios y extraños con un gran nivel ante el Chelsea. Entonces, siempre sabio y oportunista, el 'Niño' se despachó con los dos goles de la victoria y alimentó el idilio con la afición Red, devolvió la ilusión del título y aseguró una contundencia única.
El desarrollo del partido estuvo regido por características previsibles. Multitud de jugadores en el centro del campo, pocas oportunidades de peligro y casi escasas situaciones de contraataque.
Ambos equipos disputaban el duelo de manera inteligente, pero era inevitable caer en el aburrimiento, durante varios lapsos del encuentro. Un disparo lejano de Mascherano o algún centro de Boswinga que no encontró compañero dentro del área rival, eran el mayor grado de peligro que se podía aplicar a un choque demasiado cerrado.
Torres dispuso de su primera chance, cuando recibió el balón dentro del área y definió con solvencia, pero apareció la inmensa figura de Alex para frenar el disparo. Por su parte, John Terry cabezó defectuosamente, tras un centro de Lampard y apenas complicaba a Pepe Reina.
En la segunda parte, el Liverpool ajustó un poco su presión y se hizo de la posesión del balón. Gerrard adoptó una postura netamente ofensiva y acompañaba a Torres en cada embate de los anfitriones. Sin embargo, Alex estaba en su tarde predilecta y cortaba con seguridad cada intento rival.
La jugada bisagra del partido llegó a los 61 minutos, cuando Lampard se deslizó con demasiada violencia sobre Xabi Alonso y el árbitro Michael Riley decidió expulsarlo. El Chelsea había perdido a su cerebro y jamás pudo recuperarse.
Entonces, comenzó un monólogo rojo, pero el marcador continuaba sin batirse. Hasta que a falta de dos minutos, Fabio Aurelio desbordó por la izquierda, luego envió un centro corto y apareció el gran Fernando para anticipar su cabezazo y dejar en vano el esfuerzo de Petr Cech. El Liverpool alcanzaba la merecida victoria.
Asi, la jornada del delantero español terminó de brillar en tiempo de descuento. Benayoun aprovechó un error de Ashley Cole y le cedió el balón al punta para que definiera con derecha, casi con la portería vacía.
El Liverpool se llevó una victoria de oro y un rubio español fue el gran responsable. La diferencia con el United se mantiene, pero ha vuelto el hombre del gol...
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