Los ferrolanos mantienen su mala racha de resultados y ya suman trece jornadas sin ganar
Carbón y más carbón. Los Reyes Magos tampoco fueron generosos con el Racing en el primer partido del 2008. Los ferrolanos comienzan el nuevo año con los mismos males con los que despidieron el 2007, flojos en defensa, pésimos a la hora de sacar el balón y pocas ideas en ataque. El equipo que preparan los hermanos Veiga perdió ayer en Mendizorroza frente al Alavés por 1-0. Es la decimotercera jornada consecutiva sin ganar (los hermanos Veiga igualan su peor registró de hace un par de temporadas, aunque el récord lo mantiene Luis César Sampedro con una racha de 17 jornadas sin conocer la victoria).
El partido de ayer en Vitoria fue soporífero en la primera parte, con apenas ocasiones de gol ni para vitorianos ni tampoco para los ferrolanos. El Racing trabajó duro para defenderse e intentar que el Alavés no llegara con claridad al área racinguista. Lo consiguió salvo en alguna acción a balón parado como un saque de esquina, a los 33 minutos, en el que David Coromina, uno de los defensas, remató de cabeza y estrelló el balón en el larguero; así como en una buena acción de Gabri, a los 42 minutos de juego.
En ataque, el Racing apenas sí llegó arriba salvo en algún balón largo peleado por Cacique Medina, así como con un disparo del argentino Juan Pablo Raponi, que el portero Bernardo detiene en dos tiempos.
En general, el juego de los ferrolanos fue malo, poco creativo, parecido al que viene realizando en las últimas jornadas de liga. En la segunda mitad, Juan Veiga mantuvo a los mismos hombres sobre el terreno de juego y poco a poco comenzó a sentirse más cómodo ante la desesperación del Alavés, que no encontró la forma de superar a los ferrolanos y que echaron de menos a las importantes bajas que tenía para este encuentro, entre ellos de forma especial al madrileño David Aganzo, así como el ex jugador del Celta Toni Moral.
Además, los ferrolanos se estiraron un poco más en ataque y a los 13 minutos de esta segunda parte, tras un saque de falta de Jaime Júnior, Jonathan Martín, solo en el segundo palo, remata mal (con el cuerpo) y desaprovecha una gran ocasión para poner a los racinguistas por delante en el marcador.
Josu Uribe, el técnico local, no estaba contento con lo que que veía en el partido y a los 52 minutos hizo tres cambios. Entraron en el terreno de juego Rubén Royo, Igor y Samuel en lugar de Mena, Raúl Sánchez y Nacho Garro. Fue el propio Samuel, solo un minuto más tarde, quien dispuso de una clarísima ocasión de gol para su equipo, aunque Queco Piña tapó bien con su cuerpo y evitó el peligro. Fueron momentos difíciles para el Racing, con el Alavés volcado en ataque.
El primer cambio
A los 70 minutos de juego el técnico racinguista Juan Veiga retiró del campo a Raponi para dar entrada a Álvaro Antón, el jugador llegado del Valladolid, que ayer debutó con la camiseta verde.
Un par de minutos más tarde, el Alavés se adelantó en el marcador. La jugada volvió a nacer en una acción a balón parado, una falta sacada por Sergio que el lateral Coromina envía al fondo de la red y sube el 1-0 al marcador.
Juan Veiga reacciona y retira del campo a Ceballos para dar entrada al francés Lamatina, así como a Rubén García para meter a Steve Cohen. Para los racinguista fue ya nadar contra corriente, ya que el Alavés, por delante del marcador y con muy pocos minutos por delante, se dedicó a defender y a tratar de lograr un segundo tanto en una rápida acción al contraataque.
El Racing arriesgó en ataque aunque no pudo desbordar a un Alavés bien plantado en el terreno de juego, que se defendió con mucho orden y que dejó muy pocos huecos.
Los racinguistas trataron de abrir el juego con velocidad por los extremos, con entradas de Álvaro Antón y Lamatina, aunque apenas sí realizaron centros que pudieran ser aprovechados por un Cacique Medina que pasó inadvertido en este encuentro, aunque en verdad apenas sí le llegaron balones para poder rematar.
En estos últimos minutos lo más destacado fue un remate de Álvaro Antón, que fue detenido en dos tiempos por el portero vitoriano. Además de una buena dejada de Cacique Medina a la que no llega el francés Fabien Lamatina.
El árbitro añadió al partido tres minutos aunque el marcador ya no se movió. Los ferrolanos, ante un Alavés con hasta seis bajas de habituales titulares en sus filas, no pudieron sacar nada de esta visita a Vitoria y ven como otro rival directo en la lucha por la permanencia se escapa.
Queda todavía mucha competición por delante, muchos encuentros que disputar, aunque los racinguistas lo tienen cada día más difícil. Solo cabe esperar que los nuevos refuerzos contratados por la directiva racinguista, así como algún fichaje que falta por llegar, ayuden a que este equipo salga de la zona de peligro de la clasificación.
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