El Racing arranca un punto en un partido loco que acabó con diez
La expulsión de Keita complicó a los verdes en el segundo tiempo, que dejó un golazo de Álvaro Antón
El cuadro ferrolano se adelantó tres veces en el reducido campo de Motril pero fue incapaz de amarrar el triunfo
Tómense un campo pequeño, dos equipos necesitados y un par de goles tempraneros. El resultado fue el correcalles del primer tiempo, el partido frenético, vertical, desordenado y también divertido de Motril. Sin pausa se jugó en un terreno de juego reducido que convertía cualquier balón largo en un rebumbio dentro del área. Juan Veiga prescindió de Pereira porque no estaba en plenitud física y eligió a Corredoira, que incendió el primer tiempo con dos tantos. Después del descanso, el Racing resistió con diez por una injusta expulsión de Idrissa Keita.
Nueve segundos tardó el Granada 74 en servir el primer centro. Lo hizo Fagoaga y resultó un anticipo de lo que vino después. A los dos minutos cayó el primer tiro de Javi Guerra. Y el juego ya no se detuvo. El Racing aprovechó una falta en la banda derecha para que, después de un rechace, Corredoira marcase el primer gol. Respondió al momento Francisco al cabecear un balón suelto y empatar.
El tanto no hizo daño al Racing, que volvió a levantarse. Jonathan Martín despejó en largo un balón aparentemente corriente, Paco Corredoira llegó pilló desde atrás, controló, tiró un sombrero a un rival y marcó. El gol tampoco arredró al Granada 74, que se apoyó en su jugador fetiche, Luque, para llevar peligro con un tiro lejano que Piña solo pudo despejar. Francisco, otra vez, pescó el rechace y empató de nuevo.
Vuelta a empezar. El partido siguió loco al menos hasta la media hora, sin dar un respiro. La mejor ocasión la creó Álvaro Antón en una jugada por la izquierda cuyo centro remató mal Cacique Medina en boca de gol.
El Granada 74 estaba algo más cómodo en ese juego de balones largos y llegadas constantes, y pudo marcar el tercero antes del descanso. Aunque a los cuatro minutos de la segunda parte Pérez Lima cambió el guión del partido. Mostró la roja directa por un choque aparentemente normal en un salto a Keita, al que ya había mostrado una excesiva amarilla antes.
Con diez, el Racing fue dando pasos atrás. En parte por precaución y en parte por el empuje de un rival que apretaba, como cuando Francisco estampó una bonita vaselina en el larguero. Pero la calidad de Álvaro Antón abrió la posibilidad de una gesta. El burgalés controló el balón en el medio campo, miró a un lado y a otro, no vio compañeros desmarcados y marcó un gol espectacular desde 30 metros. La salvación estaba muy cerca.
Veiga sentó a Corredoira e incrustó a Castiñeiras atrás, con lo que pasó a jugar con cinco defensas, tres medios y Carlier en punta. El partido se serenó por momentos. Y pudo marcar Rudy desde fuera del área. Aunque el Granada 74 no dio apenas tregua y se encontró con un penalti a favor en el minuto 80 por mano de Cami que metió Luque.
Con el partido casi cumplido, Crespí desperdició un cabezazo solo dentro del área y ya no dio tiempo para más. El Racing suma un punto valioso y mantiene al Granada 74 a su rebufo.
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