El Racing de Ferrol ha tenido que sufrir lo indecible para confirmar su regreso a Segunda división. El equipo ferrolano acompañará finalmente al Celta en la categoría de plata del fútbol español tras mantener con grandísimas dificultades la ventaja de dos goles conseguida en Ferrol.
El Alicante salió a por todas y puso al Racing contra las cuerdas durante todo el partido. A los 10 minutos, el árbitro les había anulado dos goles a los locales por fuera de juego, pero las sensaciones no podían ser peores. Los de Juan Veiga apenas reaccionaban, ni siquiera cuando, a la media hora, Capi adelantaba al Alicante. Poco antes, el árbitro ignoraba un claro penalti del ferrolano Manolo a un delantero local.
Con muchísimos apuros también en la segunda parte, el Racing se defendía del asedio alicantino. Tiros al palo, paradones de Queco Piña, todo para mantener el gol de ventaja y evitar la prórroga. Juan Veiga introdujo todos los cambios posibles para reforzar el dispositivo defensivo del Racing, y al final dio resultado. El equipo de Ferrol vuelve a Segunda, con mucho sufrimiento, que le da más sabor al logro.
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